El miércoles pasado Jietske, mi amiga con quien vivo en Alicante, y yo fuimos por primera vez al club de gimnasia. Fue una clase muy especial. El caso es que fue el cumpleaños del profesor. Normalmente la clase comenzaría a las seis, pero, como es la costumbre española, empezó más tarde, más o menos a las siete menos cuarto. Primero, hicemos unos ejercicios en el step con música de fondo. Era muy divertido hacer deporte en el compás de música buena. Además la música me ayuda hacer deporte y aumenta el entusiasmo para persistir hasta el final de la clase. El fin de la clase era aún más divertida que el deporte en sí. Como ya he dicho era el cumpleaños del profesor y, por eso, las otras mujeres que son miembro del club deportivo habían preparado una tarta con chocolate que era buenísima. Comimos tarta y bebimos Coca Cola, lo que no es muy bueno después de haber hecho deporte. También nos encontramos con unas chicas alemanas y una chica turka que también están de Erasmus en Alicante. Aumentaron el volúmen de la música en la sala y sacaron muchas fotos. Cuando miramos nuestro reloje, ya era muy tarde y nuestra amiga Hannelore, que nos estaba esperando en el piso, se preocupaba un poco, pero en realidad fue para nada.
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